¡Locuras y más locuras!

Hace tiempo que no entraba por acá. Tiempo: Dos, tres días habrán sido, pero me he sentido tan mal, tan extraña, extrañaba algo, y era el apoyo que me brindan cada día. Y volví con el peor de mis días, me alejé, me pelee con mis amigas. Me han dicho de todo, pero claro, fue culpa de ellas todo lo que hice, y no hice nada malo, pero como siempre hay que echarle la culpa a Agustina, que, como siempre también, se traga todo, se guarda todo. Toda esa rabia, toda esa furia, enojo, queda contenida adentro mio. No sale nunca, siempre es así. Se debe a vergüenza, a ser excluida, discriminada de alguna forma, y esto terminó mal... Lloré mucho en el baño, me caí en el piso, en la ducha, estaba realmente mal. Busque una tijera que hace tiempo no encontraba, con la que me corté la primera vez; y... Vaya el primer corte en mi pierna derecha, otro más, otro más. Hasta que resultaron ser cinco tajos los que aparecieron en mi piel. Vamos por otro: en el brazo. Y debo decir que me causó un miedo terrible. Pensé que me había cortado muy profundo, pero no, no sucedió nada y me quedo tranquila por eso...Vamos a hacer otra locura: tomar pastillas, o mejor dicho: una pastilla. Celeste era, si... Era fea, un gusto feo me quedó en la boca, lo debo aceptar. En este instante me siento mareada, no veo muy bien que digamos y tengo un dolor de cabeza bastante feo, pero si: tengo que sufrir las consecuencias de todas las locuras que hago, una vez más.